Hyde Park es un bosque celta con Dojos al construirlo pensé en ti.
Si tienes una pausa de dos a tres horas con ropa cómoda te propongo un paseo por Hyde Park para comprender personas o situaciones retadoras, permitiendo que la energía de las lecciones de tu vida, el dolor, el enojo y el miedo se muevan fuera de la realidad cotidiana.
El paseo que te propongo es acompañarte por el flujo de alegría y abundancia de tu jardín interior.
Vivenciar esas energías reconectadas a la armonía de la Naturaleza.
Sentir y disfrutar de lo que tu vibración está atrayendo, de lo que nuestro cuerpo siente con las emociones que estuvimos controlando.
Visualizar las energías que el inconsciente concreta en realidades que nos hacen difícil nuestra vida, creando personas difíciles que nos desafían, cosas que no funcionan o nos hacen sentir estancados.
Comprender cuán fácil o difícil será nuestro paseo recreando escenarios energéticos del momento presente o el pasado.
Visualizar nuestras oscuridades, los puntos fuertes que nuestra conducta crea en el otro ver y sentir los escenarios nuevos que se crean dejando ir enojos y miedos.
Sentir en nuestro cuerpo que pasa cuando tomamos lo mejor de esta situación y la nueva vibración al crear una nueva realidad.
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El
paseo puede ser personal, o en grupos de dos o tres personas no más de cuatro.
El
tiempo depende del paseo, si es personal puede ser dos o tres horas y si es
grupal estamos hablando de 4 o 5 horas.
El
paseo tiene estaciones, el lugar a
pasear es un instante de paz y alegría
interior y la vuelta es estar armónicos con nuestro ser, y si se quiere hacemos
una charla afín, el objetivo es regresar a casa bien.
El
paseo se puede hacer en las 24 horas del día, el jardín cuenta con iluminación
y no depende de las condiciones del clima.
El
objetivo es que el paseante este dispuesto a pasear libre de ataduras y expectativas.
Esa
es la razón porque deje mi trabajo. Para
testimoniar mi paseo y no ser yo condicionante para quien lo realice.
En
la vida las personas tienen afinidad entre si de dos maneras posibles una por elección
(afines) y otra por azar.
El
paseo de grupo afines tiene la riqueza de trabajar la diversidad y la necesidad
de practicar la tolerancia.
El
paseo de grupo afín debe ser armado por un paseante convocador.
El
paseo del grupo azar (es el grupo de personas que no se conocen y tienen la
necesidad de encontrarse con ellos y con otros) tiene la riqueza de ser un
serendipIity (encuentro afortunado) siempre la decisión es del paseante, este
encuentro tiene un Dojo en particular y da información sobre la manera de
relacionarnos.
El
destino del paseo esta determinado solo por la luz y los pies del paseante visitándose
y recorriéndose interiormente.
Cada
paseo es único e irrepetible que nos llevará a cada uno a lugares de luz y paz
de nuestro ser.
Con
esa conciencia cada uno será responsable de las correcciones que el paseo le
pidió.